Es verano, y aunque parece que el tiempo estÉ un poco loco, hemos tenido, tenemos y tendremos días realmente calurosos. Así que estamos seguros que nos darÉis la razón en una cosa: no hay cosa que apetezca más que una buena cerveza refrescante o un helado. Pero, ¿Y si os decimos que podÉis mezclar ambas cosas? Nosotros, al menos, tocamos el cielo. Es lo que nos ha pasado al preparar este gran postre: ¡Un float de cerveza Porter! Además, la elaboración es sencillísima.
Hemos partido de una receta de Internet, pero es la primera vez que la hacemos, así que la presentación no nos ha quedado del todo elegante. En teoría, la capa de nata montada en la parte superior tendría que haber sido un poco más densa, pues como apreciáis en la fotografía, se ha hundido prácticamente en el batido de cerveza…
A parte de este pequeño incidente, el resultado ha sido increíble. Para que os hagáis una idea, al principio se nota en boca la suavidad de una crema mantecosa, similar a la vainilla, pero sin el dulzor que la caracteriza, y luego toma protagonismo el frescor del lúpulo y los sabores a cereales torrefactos, comunes en las cervezas de estilo Porter. Nos quedamos con una de las opiniones de nuestros compañeros: “Al poder refrescante de la cerveza se le añade la intensidad de una crema ligera, con lo cual este float se convierte en un postre veraniego excelente”.
Y ahora os dejamos con la receta:
Ingredientes:
- Helado de vainilla.
- Nata para montar.
- Una cerveza de 33cl de cerveza Porter o Stout (Nosotros hemos usado la porter Tortuga de Cerveza Malaqa).
Pasos:
- Pon una bola de helado de vainilla en un vaso de tamaño pinta, y luego la cerveza. Bátelo hasta conseguir la consistencia deseada.
- Monta la nata, a poder ser bien fría. Cuando estÉ en estado sólido, colócala por encima de la cerveza con helado. Si la nata se hunde es que no está lo suficientemente montada.
- ¡A disfrutar de un postre bien refrescante!
Consejos:
- Sirve este float bien frío, ¡Sabrá mucho mejor!
